Translate

lunes, 16 de marzo de 2020

Confiad, yo he vencido


Cada día necesitamos acercarnos a Dios con confianza entendiendo que su amor nos cubre y nos alienta a seguir paso a paso en dirección a su propósito. Jesús creció en medio de un entorno humilde y sencillo, conocía lo que representaba ser parte de una familia que subsistía con el trabajo diario.

El entendía cuando había escases y abundancia. Jamás estuvo ajeno a una vida común como la nuestra. Se mantuvo rodeado de personas ordinarias, y la mayoría del tiempo prefería pasar el tiempo junto a aquellos que tenían necesidad, mostraba compasión, era movido a misericordia ante la realidad de la gente que le seguía. Aquel que se acercaba a pedir no recibía un ´´no´´ por respuesta.

Su vocabulario era conducido por una palabra oportuna, dirigida a: calmar, alentar y producir paz ante cualquier circunstancia. Así pues, un día le hablo a sus discípulos en medio de la multitud diciendo: 


´´Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo´´ Juan 16:33


Esto como un anticipo a su partida, cuando él ya no esté, como si estuviese recordándonos que su palabra debe permanecer en nosotros, debe ser atesorada y guardada. Nos advierte y enseña que el mundo no será fácil, el camino estará lleno de dificultades, nos sentiremos afligidos, cansados, agotados.

Sin embargo, nos muestra un camino de esperanza, la confianza en su poder, en su capacidad como hijo de Dios para vencer. Esa disposición que tuvo de hacer lo correcto y mantenerse firme creyendo en que el Padre jamás nos abandonaría.
Esa es también nuestra esperanza, hoy, mañana y siempre.

Un abrazo!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario